Sahaja Yoga

El Despertar Interior a través de La Realización del Ser y la Meditación

Shri Mataji Nirmala Devi es única en la historia de la espiritualidad porque es la primera y la única en ofrecer la experiencia de la autorrealización en masa. Ella declaró que recibir su autorrealización es un derecho de nacimiento de todos los seres humanos, independientemente de su religión, raza, nacionalidad o circunstancia. También insistió en que no se puede pagar por la verdad o por el autoconocimiento, por lo que la autorrealización siempre se ha ofrecido y se sigue ofreciendo de forma gratuita.

La meditación Sahaja Yoga es la técnica que desarrolló para mantener el despertar experimentado a través de la autorrealización. La palabra Sahaja significa “espontáneo” y “nacido contigo”, describiendo así esta energía sutil (Kundalini) que existe en cada ser humano. Contrariamente a la creencia popular, el yoga no designa una serie de ejercicios o posturas, sino que en realidad significa "unión, unirse". El individuo se une con su verdadero yo, o se puede decir que la conciencia individual se une con la conciencia colectiva. Cuando se produce esta unión, la fuerza integradora de la Kundalini aporta equilibrio y paz tanto dentro como entre los individuos.

Shri Mataji estudió la condición humana durante muchos años, buscando una manera de desbloquear el potencial espiritual de los seres humanos. El 5 de mayo de 1970, mientras meditaba a la orilla del mar en Nargol, India, experimentó el despertar de su propia energía primordial interna. Shri Mataji supo entonces que era hora de hacer que esta experiencia y conocimiento fueran accesibles para todos los seres humanos. También sabía que esta experiencia no podía imponerse a nadie, que debía dejarse a la libertad de cada individuo decidir por sí mismo si la quería o no. Ella comenzó primero a nivel local y, finalmente, a nivel mundial, a ofrecer la autorrealización, el despertar de la energía interior sutil conocida como Kundalini, en sus conferencias públicas gratuitas. Shri Mataji pasaría horas después de estos programas con aquellos que deseaban conocerla, ofreciéndoles consejos o corrigiendo sus desequilibrios utilizando la energía que acababa de despertar en ellos.